domingo, 26 de diciembre de 2010

 Yo creo que la gente argentina ama el tango. Pero no sólo por su dos por cuatro pegadizo, que nos hace bailar. Si no porque sus melodías son un tanto melancólicas y reflejan la vida de quien la está cantando.
Podríamos saber cómo está una persona tan sólo mirándola cantar, porque su voz en cierto momento desprende un brillo único, y tan natural.
Además, no sólo cantan con la voz, si no con la mirada, con las manos. Cada gesto puede significar un amor perdido o la esperanza de que volverá ese amor, o la ciudad porteña en donde transcurrió su infancia.
En fin, el tango sobre todo, creo que trata de sanar las heridas que todavía no han podido cerrarse y esperan por eso.

3 comentarios:

Ricardo Miñana dijo...

En estas fechas tan entrañables
que la armonía, la paz y felicidad entren en tu casa.
¡¡Felices fiestas!!

Un abrazo.

La sonrisa de Hiperion dijo...

Recibe mis mejores deseos para este cambio en el contador del segundo milenio, para este nuevo año que se nos cae encima.

Saludos y un abrazo.

Marquitos dijo...

Yo me aferré muchísimo al tango estando en el extranjero, y al regresar lo olvidé completamente. Como a vos, que te tengo medio olvidada (nos tenemos medio olvidados). Igual bueno, nunca es tarde :D te quiero muchisimo (L)